miércoles, 4 de mayo de 2016

Facimoutreach P-989

¿Puede el Curso ser responsable de cambios de dieta o en el estilo de vida?

P-989: Desde que estudio Un Curso de Milagros mi vida ha cambiado de muchas maneras maravillosas. En los últimos cinco años, he estado comiendo nada más que frutas y verduras. Además, estando casado desde 1978 ((esta pregunta se hizo en 2006)), me he vuelto célibe, con la bendición de mi esposa. Me preguntaba si alguien más ha cambiado de dieta o de estilo de vida.

Respuesta: No nos hemos topado con esto muy a menudo, dado que el foco de la enseñanza del Curso reside exclusivamente en cambiar nuestra manera de pensar —no dice nada sobre la conducta. No obstante, en general, las personas se vuelven cada vez más compasivas a medida que van practicando el perdón durante cierto período de tiempo y toman conciencia del dolor interior y reconocen que ese dolor interno es compartido por todas las demás personas. Darse cuenta de esto las lleva a ser menos críticas consigo mismas y con las demás personas.

El enfoque principal de la enseñanza del Curso es cambiar el propósito para el cual usamos el cuerpo y el mundo, lo que significa volvernos conscientes de si hemos elegido al ego o a Jesús como nuestro maestro. Puesto que Jesús reconoce la irrealidad esencial del cuerpo y del mundo, nuestro estilo de vida y la comida que decidimos comer es un tema básicamente irrelevante para él. Su interés se centra únicamente en nuestra mente —en si nuestros pensamientos reflejan la doctrina del ego de los intereses separados, o bien su doctrina de los intereses compartidos. Por consiguiente él nos enseña a ver el mundo como un aula en la que todo lo relacionado con el cuerpo se convierte en un medio para aprender que todos compartimos la misma mentalidad errada, la misma mentalidad correcta, y el mismo poder tomador-de-decisiones para elegir entre esas dos mentalidades, y que nuestro propósito común es despertar del sueño de la separación. Se puede aprender esta lección tanto si eres vegetariano como si no, tanto si eres célibe como si no. Puesto que el mundo es ilusorio, no hay nada en él que sea inherentemente santo o profano —la santidad está asociada únicamente con la decisión de nuestra mente de compartir la percepción que tiene el Espíritu Santo de todas las cosas. Para una más amplia discusión de estos asuntos, puede que desees mirar las preguntas P-120, P-170, P-247, P-430 y P-448.

Link original en inglés: http://www.facimoutreach.org/qa/questions/questions201.htm#Q989

Índice de las P&R traducidas: http://hablemosdeucdm.blogspot.com/2015/11/indice-de-traducciones-de-p-de.html

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