viernes, 5 de agosto de 2016

Facimoutreach P-934

¿Cómo puedo entablar una relación personal con Jesús?

P-934: Para aprender Un Curso de Milagros el estudiante tiene que entablar en su mente una relación con Jesús o con el Espíritu Santo. El Curso nos dice esto repetidamente. Pero no nos da casi ningún consejo práctico sobre cómo hacerlo, sobre la manera de contactar con Ellos. Helen Schucman, la escriba del Curso, claramente tenía una relación personal con Jesús. Ella sabía cómo comunicarse con él. ¿Pero qué podemos hacer el resto de nosotros?

Respuesta: Qué duda cabe de que muchos estudiantes del Curso, en algún punto de sus procesos, han sentido envidia de la experiencia de Helen de escuchar la voz de Jesús. Es fácil sentir que Jesús debió de haber tenido un amor especial por Helen que nos niega al resto de nosotros. Esto es exactamente lo que el ego quiere que pensemos, porque justifica su reclamación de que no fuimos nosotros quienes abandonamos al Amor de Dios, sino que fue el Amor de Dios el que nos abandonó a nosotros. Pero creer que Helen tenía algo que nosotros no tenemos, simplemente porque no podemos escuchar literalmente una voz, es malinterpretar completamente el sentido del Curso.

Lo que necesitamos en nuestras propias mentes no son las palabras que Jesús le dio a Helen, sino el amor que las inspiró. Lo que necesitamos no es a Jesús como un personaje humano de la historia, ni al Espíritu Santo como una Entidad, sino el amor abstracto que Ellos representan.

El Curso nos dice que el cuerpo no es más que un personaje o figura en un sueño (T.27.VIII.4.3). Eso se refiere a todos los cuerpos —incluyendo a Jesús, al Espíritu Santo y a nosotros mismos como los individuos que creemos que somos. Cualquier cosa que percibamos como teniendo una identidad individual y una existencia física no es más que un símbolo en nuestro sueño.

Pero debido a que estamos tan completamente convencidos de la realidad de nuestros símbolos, un libro que hablara únicamente del amor abstracto sin personalización no nos sería de mucha ayuda. En el nivel del pensamiento humano no tenemos manera de comprender el amor abstracto. Por lo tanto, cuando ese amor abstracto que llegó de fuera de este sueño entró en la mente de Helen, ella lo experimentó como la voz de Jesús —un potente símbolo para ella. Afortunadamente, Jesús es también un potente símbolo para la mayoría de nosotros en el mundo occidental. Así que el feliz resultado es un libro que nos ofrece una manera dentro del sueño de conceptualizar el amor que viene de fuera del sueño.

Como estudiantes del Curso, deberíamos notar que probablemente nunca nos hemos dicho que no podemos seguir los dictados del ego porque no oímos su voz. En cierto nivel sabemos que el ego es sólo un símbolo. Sin embargo, cuando el Curso habla de «los insensatos alaridos del ego» (T.25.V.3.5) no se nos ocurre protestar diciendo que nunca los hemos oído. Por el contrario, sentimos una a veces dolorosa sensación de reconocimiento. Y por lo tanto aceptamos al ego como un símbolo útil, tan real como irreal.

Sin embargo, cuando el Curso nos dice que el Espíritu Santo es una «apacible y queda Voz» (T.21.V.1.6), pensamos que tenemos que escuchar literalmente una voz. Y hay una razón por la que decidimos eso de manera instantánea. En cierto nivel del que no somos conscientes, sabemos ciertamente que esta Voz del Amor es en realidad un pensamiento de amor que sigue todavía dentro de nuestra mente. También sabemos (una vez más, inconscientemente) que podríamos girarnos hacia ese amor en cualquier momento, y eso nos aterra. Por lo tanto, en un abrir y cerrar de ojos, la parte de nuestra mente que tiene miedo (simbolizada por el ego) encuentra esta astuta estratagema de que, una vez más, nos permitamos buscar pero sin nunca llegar a encontrar ((recordemos el lema del ego, por ejemplo T.12.V.7.1)).

Debido a que somos tan hábiles para mantenernos firmemente enraizados en esta dinámica y en este sueño, es muy útil la imagen de tener como guía a un hermano mayor, más sabio que nosotros, amable y amoroso. Pero, una vez más, es sólo en nuestra mente donde le necesitamos. Él no está viniendo hasta nosotros. Más bien somos nosotros, simbólicamente, quienes estamos llegando hasta él al tomar una decisión en favor de un sistema de pensamiento diferente.

Por otra parte, ni siquiera necesitamos buscar este sistema de pensamiento. Tal como el Curso dice: «Tu tarea no es ir en busca del amor, sino simplemente buscar y encontrar todas las barreras dentro de ti que has levantado contra él» (T.16.IV.6.1). Así que todo lo que tenemos que hacer es observar nuestros pensamientos y actos carentes de amor sin justificarlos ni juzgarlos. Finalmente, esto nos enseñará que nuestro dolor es autoinfligido y que seríamos mucho más felices si tomáramos una decisión diferente. Esto es lo que quiere decir darle la mano a Jesús para transcender el ego (T.8.V.6.8). Hacer esto no requiere cualidades ni capacidades especiales —sólo un poco de buena voluntad (T.18.V.2.5).

Para más comentarios relacionados con escuchar a Jesús y al Espíritu Santo, pueden verse las preguntas P-11 y P-401-a.

Link original en inglés: http://www.facimoutreach.org/qa/questions/questions187.htm#Q934

Índice de las P&R traducidas: http://hablemosdeucdm.blogspot.com/2015/11/indice-de-traducciones-de-p-de.html

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