domingo, 3 de abril de 2016

Facimoutreach P-394

¿Es esencial la meditación para tener éxito con el Curso?

P-394: Con Un Curso de Milagros aprendemos a conocernos a nosotros mismos. Los evangelios gnósticos enseñan lo mismo. Estoy practicando las lecciones, pero ¿es esto suficiente para descubrir mi verdadero ser? Por ejemplo, ¿es necesaria la meditación para poder escuchar la Voz verdadera? ¿O lo lograré de todas formas? No lo tengo claro.

Respuesta: Aunque la meditación no es esencial para la práctica del Curso, éste nos anima a que dispongamos de momentos de tranquilidad en los que podamos reflexionar, practicar ejercicios específicos del Libro de ejercicios, volvernos más conscientes de la mente, o para recordar la lección del día. No se necesitan períodos largos de meditación: «No es necesario tampoco (...) que te pases largos períodos de tiempo meditando con el objeto de romper tu atadura al cuerpo» (T.18.VII.4.9). Mientras la meditación no se convierta en un fin en sí misma, o en un sustituto de la aplicación de las enseñanzas del Curso a todas las relaciones y circunstancias de tu vida, puede ser un ejercicio útil para ti. Para una mayor claridad en cuanto a lo que hace falta, puede ser útil releer las instrucciones de la introducción al Libro de ejercicios. Básicamente, el único requisito es que hagamos lo que la lección nos pide hacer.

El objetivo del Curso es sanar nuestras mentes del pensamiento de separación. El proceso para lograrlo consiste en perdonar cada pensamiento y creencia que tengamos que refuerce la idea de la separación. Estos pensamientos y creencias se perdonan en primer lugar volviéndonos conscientes de ellos, y a continuación estando dispuestos a ofrecérselos al Espíritu Santo (la parte de nuestra mente que recuerda a Dios) para que puedan ser transformados. Recuerda, el meollo del Curso es el entrenamiento mental: «El propósito de este libro de ejercicios es entrenar tu mente a pensar según las líneas expuestas en el texto» (L.introd.1.4). Se nos pide que nos volvamos conscientes de los pensamientos, sentimientos y creencias que tenemos a lo largo del día. La manera por la que encontraremos nuestro ser es este proceso de volvernos conscientes de esos pensamientos y creencias, perdonarlos y transformarlos ((resumiendo: conciencia+perdón+transformación; siendo la "transformación" el equivalente a "elegir de otra manera")). El plan de estudios del Curso es suficiente para que encontremos nuestro verdadero ser y escuchemos la Voz que habla en favor de Dios. Es esa Voz que escuchamos cada vez que estamos dispuestos a cuestionar el sistema de pensamiento del ego con el cual nos hemos identificado, con la voluntad de dejarlo a un lado. Escuchamos la Voz cada vez que practicamos una lección —o aplicamos la enseñanza— lo mejor que podamos.

Link original en inglés: http://www.facimoutreach.org/qa/questions/questions71.htm#Q394

Índice de las P&R traducidas: http://hablemosdeucdm.blogspot.com/2015/11/indice-de-traducciones-de-p-de.html

4 comentarios:

  1. Dice en la entrada: "El proceso para lograrlo consiste en perdonar cada pensamiento y creencia que tengamos que refuerce la idea de la separación"

    Pero, o yo lo he comprendido mal, o eso puede significar tener que estar permanentemente "haciendo la práctica". Porque pensamientos que refuercen la idea de separación, al menos en mi caso, los hay con mucha frecuencia a lo largo del día.

    Un abrazo.

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  2. El proceso puede practicarse constantemente, sí. Pero no te preocupes, esto depende de la etapa en que esté nuestro proceso, de la intensidad y de la cualidad actual de nuestra capacidad de perdonar, etc. Aunque uno perdone con poca frecuencia, cada vez que sí lo hacemos se derrite una porción del iceberg de la culpa inconsciente. A más frecuencia, más rápidamente afrontamos el deshacimiento del iceberg, pero hay resistencia a esto. Y diversos factores a tener en cuenta. Por ejemplo, en los primeros años de nuestra práctica el perdón se centra mucho en la forma de un proceso mental (pensamos las ideas de mentalidad correcta aprendidas, o los "pasos del perdón", etc), pero con la práctica, el perdón se vuelve una actitud que funciona cada vez más automáticamente, sin ni siquiera pensar. Entonces, nuestra manera de ser en sí misma, es ya un constante perdón, que se activa constantemente ante cualquier eventualidad que nos encontremos.

    Sobre las oportunidades constantes de perdón, en seguida me ha venido a la mente la siguiente cita:

    Los maestros de Dios deben aprender a detectar las diversas formas de magia a lo largo de todo su entrenamiento, cada día y cada hora, e incluso cada minuto y cada segundo, y a percibir el hecho de que no significan nada. (M.16.11.9)

    Al buscar esa cita para copiártela, he encontrado otras relacionadas:

    Cada minuto y cada segundo te brinda una oportunidad más para salvarte. (T.9.VII.1.6)

    Cada día, cada hora y cada minuto, e incluso cada segundo, estás decidiendo entre la crucifixión y la resurrección; entre el ego y el Espíritu Santo. (T.14.III.4.1)

    Por eso es preciso que contestes la pregunta: "¿Qué es lo que quiero?". La contestas cada minuto y cada segundo, y cada decisión que tomas es un juicio que no puede por menos que tener consecuencias. Y éstas continuarán repitiéndose automáticamente hasta que tomes otra decisión. (T.5.V.6.2-4)

    Atacas el mundo real cada día, cada hora y cada minuto, y, sin embargo, te sorprende que no lo puedas ver. (T.12.VIII.1.3) (Y por supuesto estamos invitados a perdonar esto en cualquier momento en que seamos conscientes de lo que estamos eligiendo)

    Todo momento es una oportunidad para perdonar, porque (excepto que estemos iluminados) en cualquier momento estamos en esta situación:

    Cada día, y cada minuto de cada día, y en cada instante de cada minuto, no haces sino revivir ese instante en el que la hora del terror ocupó el lugar del amor. (T.26.V.13.1)

    Aunque en gran parte inconscientemente, nuestra mente está constantemente eligiendo la separación. Y esto abre igualmente una constante oportunidad de perdonar esa decisión, que aunque es a nivel de la mente inconsciente, el Curso nos enseña a perdonarla.

    Sin prisas, cada uno a su ritmo. Conforme progresemos con el proceso del perdón, aplicarlo se volverá más frecuente, placentero y fácil, con menor esfuerzo, acabando por ser automático, simplemente como nuestra manera de ser: nuestra manera natural de reaccionar ante cualquier situación.

    ¡Un abrazo!

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  3. Gracias, Toni. Tus aclaraciones son muy importantes.

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    Respuestas
    1. Gracias a ti. El tema tiene su lado interesante y ya que me has dado la idea, postearé mañana por la tarde una versión de este tema como post, para darle más visibilidad por si a alguien le da alguna idea para reflexionar sobre el perdón.

      Supongo que básicamente será copiar el comentario anterior, añadiéndole algunas citas de Gary Renard sobre el tema, y de paso tal vez me alargue ligeramente más en las explicaciones (la ventaja de un post es que no hay limitación de espacio para escribir, al contrario que en los comentarios jejeje). Pero básicamente será repetir lo dicho, con algunas citas y comentarios más.

      Saludos

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